Una sonrisa sana y bonita descansa en una encía sana. La enfermedad periodontal se inicia por una gingivitis, en la cual se presenta sangrado al cepillado, pero si no la tratamos a tiempo puede desembocar en una periodontitis, la cual además del sangrado constante, produce enrojecimiento importante de las encías, mal sabor de boca, halitosis (mal aliento) y pérdida del hueso de soporte con la posterior pérdida o aflojamiento de las piezas dentales.

El tratamiento de la enfermedad periodontal (periodontitis), también llamada piorrea, puede ser preventivo y curativo. El preventivo se basa en estudiar los antecedentes del paciente, odontológicos (periodontograma) y familiares y así determinar la posibilidad que tiene el paciente de sufrir la enfermedad. El curativo consiste en realizar inicialmente raspados y alisados radiculares, cuya finalidad es eliminar el cálculo dental subgingival (debajo de la encía) y el posible tejido de granulación que se haya formado para que se pueda iniciar un proceso de curación y cicatrización de los tejidos.

Sin duda, lo más importante para que este tratamiento sea efectivo, es la colaboración del paciente en su higiene diaria en casa, además de acudir a sus controles de mantenimiento y limpiezas que hayan sido determinadas por el profesional, ya que controlar la enfermedad es lo más difícil. Tratar y prevenir los problemas de la encía es fundamental aunque a menudo no se atiende a su verdadera importancia, ya que muchas veces la enfermedad es indolora y el paciente no le da mayor importancia al sangrado de las encías.

Además, debemos tener en cuenta que existen algunas enfermedades sistémicas causantes de la periodontitis, como por ejemplo, la diabetes, haciendo imprescindible la consulta a nuestros especialistas lo antes posible para evitar complicaciones.

preiimplantitis (1)
Encía normal
preiimplantitis (2)
Encía gingivitis
preiimplantitis (3)
Encía periodontitis leve
preiimplantitis (4)
Encía periodontitis severa
Periimplantitis
periodoncia-1